En octubre de 2014 abrimos nuestro primer club FIGHTLAND en Madrid, en el barrio de Chamberí, no solo con la idea de sacar adelante un negocio rentable y atractivo, sino sobre todo con la firme determinación de convertirnos en la cadena de gimnasios de boxeo más grande de España.

Si bien irrumpíamos en un mercado maduro, en el que supuestamente “estaba todo inventado”, nosotros teníamos la certeza de que nadie hasta ahora había enfocado el boxeo como un extraordinario sistema de entrenamiento personal, efectivo, divertido y adecuado para todos los públicos, con independencia de su sexo, edad o condición física. Queríamos acercar este deporte al gran público, potenciando las enormes ventajas que brinda el boxeo como entrenamiento colectivo.

No nos equivocamos… y en muy poco tiempo nos convertimos en el gimnasio de boxeo con más clientes de España. En 2016 ya estábamos montando nuestro segundo centro, en pleno corazón del centro financiero de Madrid. Impulsados por el éxito y la demanda creciente, tomamos la decisión de expandirnos también a través del modelo de franquicia. En junio de 2017 abrió el tercer club FIGHTLAND, en el madrileño Barrio de Salamanca, con un arranque y aceptación extraordinarios.